Un digital toolkit creado a partir del trabajo conjunto realizado dentro de GRAPE, con el objetivo de proporcionar pautas y herramientas a todas aquellas pequeñas comunidades interesadas en desarrollar Planes de Acción Local participativos para la transición ambiental, social y digital y fortalecer la resiliencia territorial. La herramienta fue desarrollada por REVES, la red europea de socios del proyecto.

El toolkit, incluido en una sección especial del sitio web de REVES (https://grape.revesnetwork.eu), se basa en la experiencia de estos 18 meses de actividades, acompaña paso a paso a las comunidades locales en el proceso y define un marco de referencia claro para proceder con el diseño.

«Las zonas rurales poseen, entre otras cosas, una enorme riqueza de experiencias no codificadas. Por lo tanto, la brecha que hay que salvar no es de conocimientos sino de capacidades», subrayó Luigi Martignetti, Secretario General de REVES, durante la Conferencia Final de GRAPE. Esta es también la razón por la que el toolkit es un elemento central del proyecto: apoyar la realización de Planes de Acción Local participativos que hagan un buen uso del conocimiento y conduzcan al desarrollo o perfeccionamiento de habilidades para un fortalecimiento progresivo, bajo la bandera de la sostenibilidad, de la crecimiento de pequeñas comunidades de manera integrada y participativa.

El interlocutor principal y natural de la planificación es la autoridad local, ya que tiene la tarea de implementar el propio Plan transformándolo en políticas concretas. Sin embargo, las organizaciones locales de economía social, la sociedad civil y los distintos interlocutores sociales desempeñan un papel fundamental, ya que toda iniciativa planificada prevé su implicación, como es la lógica del proyecto que acaba de finalizar.

La herramienta proporciona un marco general y flexible que puede adaptarse a las especificidades locales. Consta de una serie de bloques principales relacionados con tareas específicas, cada uno de los cuales a su vez tiene subtareas que los usuarios deben completar y sobre las que informar. «Podemos definirlo como un logbook: accediendo al área reservada se puede recoger y organizar ordenadamente todo el material útil para la redacción del Plan», explicó Martignetti.

«El punto de partida es mirar alrededor para entender por dónde empezar, sólo así es posible elaborar una visión coherente con las necesidades del territorio. El siguiente paso es involucrar a toda la comunidad local, lo que es un elemento indispensable para llegar a una visión consolidada que el Plan de Acción concretará para que pueda implementarse en la práctica».

Se trata ciertamente de un proceso largo y complicado, pero que ahora cuenta con conocimientos concretos a su disposición, gracias a GRAPE.

• Descubra el digital toolkit: https://grape.revesnetwork.eu